“El contacto diario con los vecinos es una enorme satisfacción”. Francisco Torroba. Segunda Parte.

(Especial) Intendencia Frepam 2008-2011.

Compartimos hoy la última parte de la larga charla que mantuvimos con Francisco Torroba, el intendente que encabezó ese gran equipo de gestión que gobernó la ciudad entre 2008 y 2011, luego de que ésta fuera intervenida.
“Ser intendente es estar dedicado todos los días, todo el tiempo a la función. Es el contacto diario y permanente con cada vecino, y trabajar incansablemente para resolver problemas. Es una enorme satisfacción.
Santa Rosa es una ciudad especial, de convivencia en la diversidad, con gente que en sus orígenes era de distintas nacionalidades, de diferentes credos, de diferentes sectores sociales, por lo que recobrar la armonía y concordia perdida durante 87 días fue el principal objetivo y se logró. El slogan "Santa Rosa, la ciudad del encuentro" reflejaba este objetivo.
Francisco destaca a Pedro Salas, Luis Evangelista, Elida Deanna, Ricardo Di Nápoli, Diego Boch, a la jueza de faltas Alicia Corral y sus respectivos equipos, reconociéndoles una gran capacidad de trabajo, entrega y sacrificio, no solamente a los funcionarios sino también a sus familias que los acompañaron durante toda la gestión.
Hay un recuerdo especial a su secretaria privada, Nuchi Ferretti, (quien también fue entrevistada por Pampa Noticias).
“Por su capacidad de trabajo, su entrega, su lealtad. Llegaba antes que yo al municipio y nos íbamos de noche. También a Cristina Datto, que fue Directora de Administración quien con su experiencia y capacidad de trabajo contribuyó a que me equivocara menos. Fueron las dos personas de convivencia diaria que facilitaban la tarea”.


Momentos de tristeza y alegría.

“Los momentos de alegría son muchos e incontables, cada vez que uno resolvía un problema para los vecinos significaba una gran satisfacción”.
Torroba trae el recuerdo, con mucho dolor, de la última visita que le hizo a María del Carmen Campos. La visitó en la casa de su hija Carina, y le llevó de regalo una torta galesa (costumbre que tenía con su equipo). “Me ha quedado grabada la visita a María del Carmen antes de Navidad y de su traslado a Buenos Aires, el sufrimiento que padecía y trasmitía su tremendo dolor – dice conmovido- y me fui convencido de que era la última vez que la veía”.

La relación con Pepe Di Liscia y el Concejo Deliberante.

“La relación que tuve con Pepe (vice intendente, del Partido Socialista) fue excelente. Sabíamos administrar nuestras diferencias a través del diálogo. Tenemos una amistad desde la niñez, que facilitaba las cosas, una gran persona, sumamente formado, y que participaba en las decisiones del Ejecutivo. Nunca rivalizamos y me transmitía mucha confianza.
Pepe tenía un buen grupo de trabajo en el Concejo Deliberante, y varios de los concejales colaboraban intensamente con el Ejecutivo”.

Planificación y objetivos preestablecidos.

“Los desafíos aparecen y no se estudia para estas cosas, la vida y las adversidades te forman. No hubo en la gestión improvisación, llegamos con una planificación previa. Sabíamos cuáles eran los objetivos en cada área y se sabía qué hacer. Durante nuestro gobierno la municipalidad recuperó el rol de ente público al servicio de los vecinos”.
Al ex intendente y actual diputado provincial no le gusta hablar en términos personales, siempre se refiere a sus colaboradores.
“En el paso por el municipio he ganado afectos y comprensión de los adversarios políticos. Habitualmente invitaba a todos los concejales, oficialistas y de la oposición, a comer empanadas a mi despacho, allí conversábamos a agenda abierta sobre la marcha de la ciudad y su futuro”.
Mucho queda por conversar con el dirigente radical que desempeñó el cargo de intendente y actual presidente del bloque de diputados provincial.
Sabemos que admira a líderes políticos nacionales e internacionales. “Winston Churchill, porque fue el hombre que en las horas mas difíciles enfrentó al nazismo. Una persona que puso todo su esfuerzo e inteligencia para detener a Hitler.
En Argentina, a los Padres de la Patria: San Martín y Belgrano, por su entrega y sacrificio. A Sarmiento por su titánica obra educadora. En educar hay un espíritu democrático extraordinario. A Arturo Illia, austero y de bajo perfil. Durante su presidencia Argentina creció a tasas chinas. Hombre intachable, con la austeridad propia del radicalismo.
Y a Raúl Alfonsín, el restaurador de la democracia, el hombre que convenció a todos los argentinos de trabajar juntos por una democracia para siempre. Una persona de sólidas convicciones y que creía en lo que predicaba. Desde aquél entonces Argentina desanduvo el camino, se ha profundizado la grieta y el desencuentro de los argentinos”.