Efecto invernadero, cambio climático y el petróleo en Argentina.

El avance de las energías renovables y los cambios necesarios en nuestro país.

El cofundador de Microsoft Bill Gates anunció este jueves que invertirá 1.500 millones de dólares en proyectos para el medio ambiente con el gobierno de Estados Unidos si se aprueba una ley para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, actualmente en proceso en el Congreso.
Si el proyecto pasa la Cámara de Representantes, donde enfrenta una votación difícil, “esta colaboración no solo nos llevará a recorrer un camino más duradero hacia un compromiso de cero emisiones, sino que creará empleos de corto y largo plazo en comunidades en todo el país”, dijo Gates, según un comunicado publicado por CNBC.
El proyecto incluye aviones que no contaminan y tecnología para capturar carbón en el aire.
Para eso “es fundamental poder bajar el costo y las escalas de estas tecnologías de manera gigantesca”, dijo Gates al diario Wall Street Journal.
“Nunca se logrará esa escala a menos que el gobierno adopte políticas adecuadas, y eso es exactamente lo que viene en la ley de infraestructura”, expresó Gates.

 

Vamos a perder el tren si no se implementamos las políticas correctas.


Por otra parte, bajo el título “Explotar el petróleo que nos queda y usar bien la renta antes de que sea tarde”, (de los autores del libro “La Renta del Petróleo en la Argentina - Daniel Montamat y el pampeano Agustín Torroba) Ise enuncia que mientras el mundo debate la nueva normalidad aún en pandemia, como parte de la transición energética, el presidente de Estados Unidos Joe Biden acaba de firmar una orden ejecutiva en la cual se establece como objetivo que, para 2030, la mitad de los autos que se vendan deben ser eléctricos o híbridos. Esto puede resultar un fuerte golpe al consumo mundial de petróleo, del cual Estados Unidos representa el 20 por ciento. Este tipo de medidas que hace prever que el pico de consumo de petróleo (peak oil) se adelantará a muchos de los pronósticos existentes, motiva a pensar cuál es la política óptima para maximizar la renta petrolera en el país antes de que sea tarde.
Con los precios del petróleo en los niveles actuales, la Argentina cuenta con reservas de petróleo probadas valuadas en más de 130 mil millones de dólares. También cuenta con “recursos” de shale oil en Vaca Muerta (debe mostrarse su potencial económico) valuados en varias veces las reservas probadas.
El avance de las energías renovables y los muy necesarios compromisos mundiales en la descarbonización, pueden provocar que esos recursos fósiles terminen durmiendo el sueño de los tiempos.
Es necesario asegurar mecanismos previsibles en las reglas de generación y distribución de renta petrolera para optimizar la generación de ingresos antes de que sea demasiado tarde. También es necesario introducir el debate sobre el uso de la renta petrolera que apropia el Estado (nacional y provincial): si sólo se utiliza la misma para solventar gastos corrientes, se consolida una cultura rentística nociva para el desarrollo e injusta para las generaciones venideras. Es imprescindible utilizar los recursos de la renta petrolera en la promoción del capital humano, infraestructura, la innovación y las energías renovables, de forma tal de crear mecanismos que generen ingresos inter-temporales.
El 3 de junio de 1922, el país creó la empresa YPF, dando impulso a una industria petrolera por aquel entonces infante en nuestro medio. Hoy, entre reservas probadas y recursos técnicamente potenciales (sólo los de Vaca Muerta) la Argentina tiene en su subsuelo un inmenso potencial y una ventana de oportunidad para desarrollarlo que está acotada en el tiempo. Vamos a perder el tren si no se implementamos las políticas correctas. El enfoque de la renta y la previsibilidad de los mecanismos que rigen su apropiación y reparto, además de la experiencia comparada, deben guiar las políticas públicas en la nueva “batalla del petróleo” que hay que librar.

(Infobae)