Centro Sol Pampa, un espacio de contención y actividades laborales para personas con diferentes capacidades.

Marcela Coli visitó las instalaciones en Macachín. “Sentirse útiles y la inserción en  la comunidad es fundamental para su desarrollo”.

La diputada nacional por la Unión Cívica Radical Marcela Coli visitó este fin de semana el Centro Sol Pampa, de la localidad de Macachín.
Junto a parte de sus colaboradoras, recorrieron las instalaciones de la institución que comenzó a funcionar hace poco mas de un año, y brinda trabajo y capacitación a personas con distintas discapacidades.
Betty Marrón, Nelly Holgado y Susana La Menza fueron las encargadas de describir como comenzó a funcionar y las actividades que se realizan, que pertenecen a la Fundación Mujeres Cooperativas.
“Esta marca, Sol Pampa, está registrada y es con ella que salen los productos que son trapos rejillas, trapos de piso, macetas sustentables, bolsas, ensaladas y sopas que los chicos reparten en la localidad. Son personas entre 18 a 50 años aproximadamente. Están integradas a la comunidad hasta que terminan el secundario y luego no tienen una actividad especifica que los contenga. Acá trabajan, firman una planilla de asistencia, tiene responsabilidades que asumir. Ellos toman los pedidos aquí, en Doblas y en Rolón, porque también concurren tres chicos de esa localidad”.
“Las personas que asisten tiene diferentes discapacidades, motriz, intelectual” comenta Susana. Somos la única cooperativa que funciona de esta manera en La Pampa”.
Uno de los inconvenientes que tiene Sol Pampa es el edificio donde funciona, que lo tienen en comodato. Reciben ayuda de dos cooperativas de la zona, del municipio y de las empresas de Macachín. “La institución que funcionaba anteriormente figura como morosos, a partir de ahí tenemos estos problemas para cumplir con otros objetivos que tenemos. Tienen que solucionar este problema porque cuando damos esta dirección, nos trae muchos inconvenientes”.
Las personas que asisten allí sólo cobran un plan Promover, que son “$25.000, nunca hubo aumento desde que comenzamos con esta obra. Para ellos es sumamente importante recibir un salario por este trabajo, y aprender a manejarse con el dinero y mantener una relación laboral. Desde que terminan el secundario, sienten que no encajan en ningún lado, no tienen inclusión. La idea no es que permanezcan acá, sino que consigan una labor en otros lugares, relacionarse con otras personas.
Por ahora funciona sólo de mañana por la falta de fondos, la idea sería que también tengan actividades de tarde, hay chicos que necesitan atención personalizada, y necesitamos pagar mas personal”.
Comentaron las fundadoras que todos interactúan con la comunidad, salen a tomar pedidos, van acompañados de alguien del grupo, confeccionan los elementos y luego lo llevan a los destinatarios. Hemos comprado la mercadería, insumos, muebles, máquinas. En esta gestión el municipio incorporó dos empleados para ayudarnos. Las mujeres cooperativas también nos ayudan con eventos especiales, por ejemplo hicieron 90 docenas de canelones porque necesitábamos fondos.
Coli, luego de recorrer las instalaciones, les comentó que como docente está acostumbrada a tratar con esta problemática, incentivándolas a continuar trabajando e integrándolos a la comunidad.